La carne de vacuno gallego se destaca por su calidad y sabor, gracias a la crianza en condiciones naturales y la maduración en seco de la carne. Cada raza tiene sus propias características y atributos que hacen que su carne sea apreciada por los consumidores.
El vacuno gallego es muy apreciado en la gastronomía española por su carne de alta calidad. Criado en la región del noroeste de España, en un clima atlántico húmedo y en pastos de hierbas autóctonas, se obtiene una carne de sabor y textura únicos. La carne de vacuno gallego es jugosa, sabrosa y tierna, debido a la forma de criar a estos animales. Además, la tradición culinaria gallega ha sabido sacarle el máximo partido a esta carne en platos como el churrasco, el lacón con grelos o el famoso caldo gallego.
- Rubia Gallega: Esta raza autóctona de Galicia tiene una carne tierna, jugosa y sabrosa debido a su infiltración de grasa y su maduración natural. Además, se caracteriza por ser una raza rústica y resistente a las inclemencias climáticas, lo que hace que su carne tenga un sabor y textura únicos.
- Limiá: Raza autóctona de la provincia de Ourense, en Galicia, es conocida por su carne tierna y sabrosa. Esta raza se caracteriza por ser de talla pequeña y robusta, lo que la hace ideal para pastar en zonas de montaña.
- Frisona: Es una raza lechera que también se cría en Galicia y cuya carne es muy apreciada por su sabor y textura. Esta raza tiene una carne con un gran nivel de infiltración grasa y es muy sabrosa.
- Asturiana de los Valles: Aunque es originaria de Asturias, esta raza también se cría en Galicia. Se caracteriza por tener una carne tierna y jugosa, con un sabor suave y delicado. Además, se destaca por ser una raza muy rústica y resistente a las condiciones climáticas adversas.
- Gallega Negra: También conocida como «Cachena», esta raza es una de las más pequeñas de España. Su carne es muy sabrosa, tierna y jugosa, gracias a su lenta maduración natural. Además, se caracteriza por ser muy rústica y resistente, lo que la hace ideal para pastar en zonas montañosas.
- Morucha: es una raza autóctona de la provincia de Salamanca, aunque también se cría en algunas zonas de Galicia y Portugal. Se caracteriza por tener un pelaje de color castaño oscuro y una gran musculatura. Su carne es muy apreciada por su sabor intenso y su textura jugosa y tierna.
- Cadelana: también conocida como cachena, es una raza autóctona de la zona montañosa de la comarca de los Ancares, en Galicia. Es una raza pequeña y resistente, adaptada a los duros terrenos de montaña. Su carne es muy valorada por su sabor intenso y su textura jugosa y tierna, similar a la carne de la raza rubia gallega. Sin embargo, su tamaño reducido limita la cantidad de carne que se puede obtener por animal.